Calidad y más calidad para sostener una industria de palta competitiva

La calidad de la palta Hass peruana durante el 2024 ha sido bastante buena y el principal soporte para la constante construcción de confianza en nuestros clientes y el consumidor final. Pese a algunos casos de rechazos debido a irresponsables exportadores, los comentarios sobre la calidad de nuestra palta han sido positivos en los mercados internacionales. No hay que descuidar este aspecto para que nuestra industria siga siendo reconocida y competitiva.

En opinión del gerente Comercial de Fruchincha, José Antonio Berendsohn, nuestras exportaciones prioritariamente deben estar acompañadas primero con calidad, segundo con calidad y tercero con calidad. “Si no tenemos calidad, vamos a perder no solo a los clientes, sino poco a poco los mercados”, advirtió

AMBIENTAL Y SOCIALMENTE RESPONSABLE

Señaló que, por la exigencia que están poniendo los principales mercados, tenemos que ser capaces de producir la palta no solo de calidad, sino de una forma medioambientalmente amigable y socialmente responsable.
“Cuando hablo de medioambientalmente amigable me refiero, por ejemplo, al tema de la utilización y manejo de aplicaciones en campo. El uso de los recursos también es algo que hay que optimizar. Los mercados cada vez nos piden mayores certificaciones de cómo controlamos toda nuestra operación a nivel campo y a nivel packing en general. Nuevamente, no solo la parte ambiental sino también la parte social”, amplió.
Reiteró que “todo el apoyo y esfuerzo que se realiza con la promoción a nivel mundial siempre tiene que estar sustentado con buena calidad, una producción amigable con el medio ambiente y socialmente responsable, es por ahí donde vamos a lograr cumplir los retos que tenemos”.

RESPONSABILIDAD CON MERCADOS

José A. Berendsohn, anotó que el sector tiene muchas empresas agroexportadoras y todas deben manejar el producto de manera responsable y siguiendo las buenas prácticas agrícolas, cumpliendo con los niveles máximos de residuo permitidos en cada destino, de lo contrario se puede poner en riesgo el libre acceso a un mercado que tantos años, esfuerzo e inversión le ha costado abrir a toda la industria.
“Queremos cuidar nuestros mercados, mantenerlos y desarrollarlos”, enfatizó.

RETOS Y DESAFÍOS 2025

De otro lado, indicó que, precisamente, uno de los principales retos para el 2025 es una buena calidad (interna y externa) durante toda la campaña. Pero, además, en línea con los retos de años anteriores, también es necesario mejorar nuestros rendimientos por hectárea, ampliar nuestra ventana semanal de cosechas, mejorar la elaboración y cumplimiento de nuestras proyecciones semanales, incrementar el consumo en los principales y nuevos mercados, etc.

Sobre los desafíos a enfrentar y tratar de manejar/superar, dijo que se tiene el cambio climático y sus consecuencias, los tiempos de tránsito, el bajo consumo y conocimiento del producto, la prensa negativa, el incremento de la oferta concentrada, entre otros.

“Debemos tener muy claro que el incremento de la producción de Hass en Perú y en los distintos orígenes va a continuar y muy probablemente a una velocidad mayor a la que pensamos. Por ejemplo, en el 2018 Perú proyectaba que para el 2023 se tendrían alrededor de 42 mil hectáreas sembradas; sin embargo, la realidad fue que tuvimos más de 67 mil, es decir, casi un 60% más de lo proyectado. Esto es algo de lo que no tenemos control”, anotó

En otro momento, José Antonio Berendsohn indicó que la calidad también es importante para hacer frente a la competitividad que es cada vez más fuerte en la industria de la palta.

Al respecto, dijo que Colombia y algunos países del África como Sudáfrica, Kenia, Tanzania y Zimbawe en hemisferio sur son algunos de los principales competidores del Perú en Europa. En el mercado USA la competencia es con palta mexicana y la local californiana.